El poder del ahora

Existen tres tipos de tiempo (Pasado, presente y futuro), si quisiéramos definirlos podemos decir que el pasado es lo anterior al presente, el presente es justo lo que sucede cada segundo, y el futuro es o son esos momentos que sucederán en tiempos posteriores al presente.

Pasado

Los humanos vemos al pasado como ese monstruo con el que no podemos luchar debido a que es imposible volver a él. El segundo que acaba de pasar se lleva con él una historia que es imposible de borrar.

Como nos percatamos que era imposible luchar contra nuestro pasado, decidimos que teníamos que convertirlo en una fuente de aprendizaje. Convertimos al pasado en el manual donde buscamos las causas de nuestros éxitos, para poder aplicarlas de nuevo y obtener éxitos en un futuro. Pero sobre todo, lo volvimos el manual donde revisamos nuestros errores para aprender de ellos y así evitar fracasos futuros.

Futuro

El futuro lo convertimos en el paraíso. Para nosotros el futuro es ese lugar perfecto y mágico donde todo estará bien, es ese lugar por el que trabajamos, estudiamos y damos nuestro máximo esfuerzo día a día. Vemos al futuro como la recompensa al dolor que estemos sintiendo en un momento determinado, incluso convertimos al futuro en el premio que le vamos a dar a nuestra pareja, papas, hijos, amigos, vecinos, o sociedad, por nuestros errores, descuidos, o ausencias.

Presente

¿Qué hay del presente? Para nosotros el presente es ese momento que se debe aprovechar para construir un buen futuro, el presente lo convertimos en ese espacio de tiempo que sacrificamos para el día de mañana, vivir mucho mejor, dejar un legado, poder darle una buena vida a nuestra pareja, o darle una vida digna a nuestros hijos o papas. En conclusión, solo vemos al presente como la materia prima del futuro.

Pero se nos olvida que el presente también es esa expresión del tiempo donde nos llenamos y llenamos de energía a las personas que tenemos a nuestro alrededor. Se nos olvidó que las personas que nos rodean necesitan vernos, compartir con nosotros, necesitan mirar nuestra sonrisa, recibir un detalle nuestro por más bobo que parezca.

Porque al final esos momentos que pasamos con nuestros seres queridos se convertirán en la energía que ellos necesitan para acompañarnos en nuestros procesos, esos momentos más adelante serán lindos recuerdos que nos sacaran sonrisas o lágrimas y nos darán el combustible para levantarnos después de una caída.

Si no dejamos una parte de nuestro presente para compartir lindos momentos con nuestros seres queridos, para acompañarlos en sus momentos difíciles y estar en sus momentos importantes, vamos a llegar a un futuro en que probablemente consigamos todo el éxito que hemos perseguido, pero no tendremos a nuestros papás a nuestro lado, tal vez en ese futuro nuestros amigos y pareja se hayan marchado.

Incluso si no vivimos nuestro presente, si no nos dedicamos tiempo a nosotros mismos, puede que ese futuro nunca llegue, porque al final no hay nada más incierto que el futuro, puede que no soportemos el remordimiento de ver partir a un ser querido y saber que no le dimos todo el amor que se merecía, o puede que nuestra salud mental llegue a un punto de quiebre.

Dale a tus padres, pareja, hermanos, abuelos, tíos, primos, amigos, sociedad de esa materia prima que usas para construir ese futuro de éxito, ellos se la merecen, ellos necesitan de tu amor. Pero sobre todo dáselas hoy, porque mañana puede ser tarde. ## ### ######, ## ### #####, ## ##### #####